Alisar una vivienda puede ser un proceso laborioso, pero con la práctica y el conocimiento adecuados, se puede lograr un resultado excelente. En este artículo, continuaremos la descripción del segundo día de trabajo en la alisación de una vivienda.
El primer paso después de dejar secar la primera mano es aplicar una segunda mano a todo el techo. Es importante que esta mano sea más gruesa y más importante que la primera, ya que se necesita para asegurar que el techo esté completamente cubierto y listo para lijado.
Para aplicar la segunda mano, se utiliza una espátula grande y se extiende desde abajo hacia arriba, asegurando de cubrir todo el techo. Es importante tener cuidado al aplicar la pasta, ya que puede ser pesada y difícil de manejar. Además, es crucial evitar dejar bordes o áreas sin cubrir, ya que esto puede requerir una tercera mano.
Después de aplicar la segunda mano, se debe dejar secar durante un período de tiempo adecuado. A medida que se deja secar, se debe revisar el techo para asegurarse de que no haya áreas sin cubrir o con bordes. Si se detectan áreas problemáticas, se deben corregir antes de proseguir.
Una vez que la segunda mano esté completamente seca, se puede proceder a aplicar una tercera mano. Esta mano debe ser más finita y menos importante que las dos primeras manos, pero aún así es crucial para asegurar que el techo esté completamente listo para lijado.
Para aplicar la tercera mano, se utiliza una espátula pequeña y se extiende desde abajo hacia arriba, asegurando de cubrir todo el techo. Es importante tener cuidado al aplicar la pasta, ya que puede ser pesada y difícil de manejar. Además, es crucial evitar dejar bordes o áreas sin cubrir.
Dividiendo el Techo en Carriles
Una vez que se han aplicado las tres manos, se debe dividir el techo en dos carriles: el carril izquierdo y el carril derecho. Esto se hace para asegurar que se pueda trabajar de manera eficiente y evitar errores.
Al dividir el techo en carriles, se debe comenzar desde la mitad del techo y trabajar hacia los extremos. Es importante tener cuidado al aplicar la pasta en cada carril, ya que puede ser pesada y difícil de manejar.
Trabajando en Carriles
Una vez que se han dividido el techo en carriles, se debe comenzar a trabajar en cada uno de ellos. Se debe aplicar la espátula con cuidado y extender la pasta desde abajo hacia arriba, asegurando de cubrir todo el carril.
Es importante tener cuidado al trabajar en los bordes y esquinas del techo, ya que pueden ser difíciles de manejar. Además, es crucial evitar dejar áreas sin cubrir o con bordes.
Revisión Final
Una vez que se han aplicado las tres manos y se ha dividido el techo en carriles, se debe realizar una revisión final para asegurar que todo esté listo para lijado.
Se deben revisar los bordes y esquinas del techo para asegurarse de que no haya áreas sin cubrir o con bordes. Si se detectan áreas problemáticas, se deben corregir antes de proseguir.
Una vez que se ha realizado la revisión final, se puede proceder a lijado el techo para revelar su superficie lisa y suave.
Conclusión
Alisar una vivienda es un proceso laborioso que requiere paciencia, dedicación y conocimiento adecuados. En este artículo, hemos descrito los pasos para aplicar las tres manos y dividir el techo en carriles. Es importante tener cuidado al trabajar con la pasta y asegurarse de cubrir todo el techo sin errores.
Recuerda que la práctica hace la perfección, así que no tengas miedo de hacer experimentos y ajustes para mejorar tus habilidades en la alisación de una vivienda.